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Así la vemos: No es locura, es fascismo


04 de noviembre de 2023

Barbaridades endilgadas a locos, que solo son fascistas. Columna de opinión desde los adultos mayores, por Alberto Gómez.

Alberto Gomez

Continúa la espera para elegir a nuestros representantes, y se acentuaron los ataques de la pérfida comparsa de buitres, y sus pichones aliados; comunicantes de los medios; que son creadores históricos de esas políticas nefastas para destruir un país, y dejarlo inerme, para que los carroñeros terminen de colonizarlo.

Cuál es la situación actual de nuestra democracia

Vemos, como las petroleras presionan con lock outs para seguir acumulando ganancias exorbitantes en sus bolillos, aprovechando para atacar y seguir demoliendo la democracia.

No es más que otra saqueadora maniobra sucedánea de quien ahora quiere liderar son su “apoyo” (Macri) a la ultraderecha que se presentará en el ballotage, utilizando un farabute auto definido libertario.

Por supuesto, el círculo rojo (AEA, UIA, entre algunos) apoyan entusiasmados todas las medidas coercitivas del poder real, encarnándose como mercado, pero realmente muestran sus asociaciones, y complicidades, con inmensos intereses internacionales dominantes, imperialistas y acosadores de naciones, o ya colonizadas, o atacando otras, para anexarlo como territorio supranacional, y convertirlos en proveedores de sus riquezas naturales, y materiales, sometiéndolas a una iliquidez acuciante.

Para graficar mejor la situación de conflagración mundial de la economía, citemos que hace dos días, se reunió la ONU para levantar el bloqueo de Cuba, y de los 187 miembros, solo 3 se abstuvieron en su voto contra el resto. ¿Quienes fueron? Estados Unidos e Israel (colonizadores imperialistas) y Ucrania (colonizada con armas).

La lucha es por diezmar nuestra economía, arrodillarla, y sumirla en una crisis terminal que obligue a entregarse a los designios de los carroñeros de siempre.

Esta nueva derecha, es vieja en su concepción ideológica para quedarse con todos los negocios, seguir acumulando, y lograr el descarte definitivo de la mitad de la población, cerrando  la posibilidad de alguna mejora en sus vidas.

Recordemos, el mascarón consejero de la derecha nuestra de hoy, había dicho en su período constitucional, que si ganaba su reelección, lo haría todo, “igual, pero más rápido”.

Quieren retornar para completar lo que les quedó pendiente de su ataque durante el período 2016/2019, aunque la mayoría de los ciudadanos entendió el sentido de esas palabras, y los dejó afuera de la competencia electoral. ¿Ahora que harán?

Pero, no nos dejemos engañar por las propaladoras del odio (Clarín-LaNaciónMacri) cuando nos quieren hacer creer que los libertarios son locos.

Que quede claro, no están locos, llamémoslos fascistas. A lo sumo podríamos reconocerles que tienen impulsos irreflexivos, el cual no debe ser aceptado, y menos aún “festejado” por una población reflexiva; que sufre, y sufrió, las acciones empobrecedoras históricas de éstos derechosos oligarcas.

Sepamos, el fascismo no es un proyecto de insanos, es el gobierno encubierto de, y para, individuos “normales”.

 

Que es el fascismo

Es un buen momento para conocer un poco la Historia del fascismo, nacida como corriente ideológica en el siglo XX, entre las dos grandes guerras mundiales.

Los regímenes fascistas se implantaron en Europa durante la primera mitad del siglo XX, y desde entonces distintos Gobiernos han adoptado algunas de sus formas. El primer régimen fascista fue la Italia de Benito Mussolini (1919), y luego Adolf Hitler (1933-1945) y la España de Francisco Franco (1939-1949).

Surgido tras la Primera Guerra Mundial, consecuencia de la crisis económica consecuente. Los burgueses, empobrecidos, temían el auge del movimiento obrero, especialmente tras el triunfo de la revolución bolchevique (Rusia 1917).

El fascismo se presentó como enemigo visceral de la ideología marxista y sus variantes (anarquismo, comunismo, socialismo o socialdemocracia), gozando del apoyo de grandes empresarios, aristócratas y conservadores.

En la economía, el régimen fascista interviene en el mercado para favorecer ciertas industrias y controlar el movimiento obrero con sindicatos verticales. Permite la propiedad privada, recordando que, grandes industriales colaboraron con muchos regímenes fascistas europeos tras la primera gran Guerra. Ejemplos, Opel, Ford, Porsche, crearon vehículos para Alemania en su Tercer Reich.

Socialmente, el fascismo glorifica el ultranacionalismo y ultraconservadurismo. Estos, representan la marginación, generan violencia, e incluso determinaron el exterminio de quienes consideraban sus enemigos, incluidas minorías étnicas, opositores políticos o intelectuales.

 

Similitudes argentinas, con la Historia fascistoide vivida

Muchas de las observaciones detalladas en la Historia del fascismo, las hemos visto, y vemos aún (últimos años 1916/2023), con una oligarquía, a semejanza de los terribles regímenes antes citados, que modernizó su accionar, y aportó una burguesía industrial aliada al régimen de turno, controlando el movimiento obrero, acabando la justa distribución de la riqueza gozada en el “régimen” populista, y sojuzgándolo a través de sindicatos debilitados, o en muchos casos cooptados.    

Marginó a más del 40% de la población a la pobreza o indigencia, generó violencia (motosierras, deshumanización con mercados de órganos, antivacunas) y hasta intentó exterminar a quienes ellos consideran su enemigo, con el intento de magnicidio a la Vicepresidenta de la Nación. Ahora, como canto de cuervos domesticados, repiten al unísono, hay que eliminar al “kerchnerismo”.

Que nos espera si no reflexionamos sobre lo vivido democráticamente

No hay que ser muy entendido ni leído, para darse cuenta de las similitudes tremendas entre las asesinas acciones fascistas de la historia y las políticas neofascistas que nos han hecho vivir la manada de conservadores y oligarcas que rigen nuestro destino desde hace más de siete años.

Nos preguntaremos, el período 1916 a 2023 incluye o involucra a algunos de nuestros representantes populares. Y sí, nunca debemos olvidarlos, porque los distintos fascismos del siglo pasado, nacieron y crecieron a partir de las fallas democráticas que signaron la vida de sus ciudadanos.

No obstante, en esta renovación constitucional, debemos priorizar las diferencias entre los que pretenden llegar a la cima de la democracia. Por un lado la destructiva derecha ya sufrida, la cual cooptó a un pseudo libertario irracional, contra un posible gobierno de unidad, al cual luego, deberemos analizar.

Hoy, prioricemos seguir viviendo en democracia, conservar derechos adquiridos, desterrar prácticas deshumanizadas prometidas (venta de órganos, adopción, etc.) y fundamentalmente para seguir luchando en mejorar la vida del 50% de la gente, sin generar derramamientos de sangre inocente, como en el 2001.

 

CONCLUSIONES

Ya  no quedan más que las dos opciones planteadas más arriba. O votamos masivamente a favor del único candidato que nos puede brindar un poco de coherencia en sus pensamientos, o pegaremos un salto al vacío de indescifrable resultado final.

 

Alberto Gomez

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