Télam: la historia de la agencia que quiere cerrar Milei
09 de marzo de 2024
El ataque a Telam y sus trabajadores concitó la solidaridad de todo el movimiento obrero y distintos referentes del universo polÃtico argentino que se acercaron para ser parte del abrazo simbólico en su defensa. Los trabajadores iniciaron un acampe en la puerta de la agencia.
Historia de una agencia de noticias
Fundada por el entonces secretario de Trabajo y Previsión, Juan Domingo Perón, la agencia de noticias nace con un fin especÃfico: contrarrestar la hegemonÃa de las agencias de noticias extranjeras en el paÃs. Un par de años más tarde, la agencia se mudaba a su primera sede sobre el teatro Maipo.
Tan sólo diez años después de su fundación, Télam enfrenta su primer ataque. El gobierno de facto autodenominado “Revolución Libertadora” puso a la agencia bajo la órbita de la Fuerza Aérea, llevó al exilio a muchos de sus periodistas e intentó su desmantelamiento. Si bien este intento no fue exitoso, la agencia siguió funcionando con un número de corresponsales muy reducido.
Años más tarde, con el gobierno democrático de Frondizi, llega el primer intento de privatización. En 1953, el gobierno de facto de Guido lleva adelante el primer intento de clausura la agencia por “difundir informaciones falsas y tendenciosas que, por su naturaleza y alcance, atentan contra el orden público y la tranquilidad de la población", acusación repetida -con más o menos palabras- por reiterados gobiernos de derecha.
En 1968 Télam vuelve a la órbita estatal, y continúa su trabajo cubriendo eventos históricos para el paÃs como lo fue por ejemplo el Cordobazo. Los ‘70 fueron una década convulsionada para la agencia, la cual contó con varios trabajadores desaparecidos y sufrió la pérdida de buena parte de sus archivos. Entre estos archivos destruidos se encontraba parte de la cobertura de la guerra de Malvinas, material exclusivo ya que fue el único medio habilitado para cubrirla.
Con la vuelta a la democracia, Télam debe enfrentar un nuevo ataque por parte del Menemismo. En una primera instancia el presidente Carlos Menem nombra un interventor para la agencia, para un par de años más tarde intentar cerrarla definitivamente. Asà como este intento no tuvo efecto, tampoco lo tuvo el intento de De la Rúa en el 2000, el cual fue enfrentado por sus trabajadores en la previa al 2001.
Durante las décadas siguientes Télam monta su sitio web, pone en pie nuevas corresponsalÃas y consigue su actual sede en la calle BolÃvar. En 2015 sus trabajadores nuevamente se ponen en pie de lucha contra los ataques: esta vez le tocó enfrentar -y revertir- los despidos masivos del macrismo.
Ataques de un gobierno libertario y resistencia de los trabajadores
Hoy, después de 79 años de enfrentar los ataques de la derecha, Télam se pone nuevamente de pie para enfrentar un intento de cierre por parte del actual presidente. El domingo 3 de marzo, los trabajadores y trabajadoras de la agencia de noticias descubrieron que estaba caÃdo el sitio web y encontraron vallados los edificios donde cumplen sus tareas laborales.
En un masivo acto en la puerta de Télam, Carla Gaudensi (trabajadora de Télam y secretaria general de la FATPREN) declaró que el cierre de Télam “no solo atenta contra la libertad de expresión y el pluralismo, sino que atenta contra el mapa comunicacional de medios”.
Numerosos testimonios de trabajadores y trabajadoras de prensa relatan cómo el trabajo de los medios se vuelve más difÃcil sin el trabajo de Télam. Es que Télam, como agencia de noticias, cumple la tarea de aportar los llamados “cables”, la información en bruto para que los medios puedan trabajar y construir las noticias que acercan a sus lectores, oyentes y televidentes. Asimismo, el archivo de Télam incluye fotografÃas completamente representativas de momentos históricos para el paÃs. En este momento, no está claro que sucederá con ese archivo.
Tal como declara Gaudensi, “nunca vimos un ataque tan brutal y tan violento como el que tenemos hoy” pero “Télam se va a defender, porque no solamente se trata de nuestros puestos de trabajo en publicidad y periodismo. Télam es, además, la que garantiza la democracia. Asà que la vamos a defender y no se va a cerrar, porque los trabajadores no lo vamos a permitir.”