Se reactiva la pelea de los sindicatos contra el impuesto al trabajo
Aprobado el paquete fiscal que restituye la cuarta categoría del impuesto a las ganancias para 1.150.000 trabajadores, los gremios buscan frenar el gravamen con diferentes estrategias.
Parece la prehistoria, pero no pasó ni un año del día en que el por entonces ministro de economía Sergio Massa anunció la suba del mínimo no imponible del impuesto a las ganancias al piso de 15 salarios mínimos vitales y móviles, lo que dejaba exento del impuesto al trabajo a millones de trabajadores y dejaba reducida esa carga impositiva a tan solo 80.000 Ceos y directores de grandes empresas. También parece que pasó una década de la sesión en diputados en la que Javier Milei votó a favor de esa iniciativa y juró que jamás subiría los impuestos. Mintió el loco, como cuando le dijo a Fantino que tenía en su celular los dólares para dolarizar.
Presionado por la auto imposición de lograr un superávit fiscal a como dé lugar, Milei envió al Congreso de la Nación un paquete fiscal que, entre otras cosas, restituye la 4ta categoría del impuesto a las ganancias poniendo un mínimo no imponible de $1.800.000 para un soltero, algo así como 1275 dólares al cambio paralelo del cierre de esta edición de INFONATIVA; y de $2.200.000 para un casado con dos hijos estirando el universo de contribuyentes a unos 800.000 trabajadores. El paquete fue aprobado en Diputados, modificado y rechazado en este punto en el Senado y vuelto a su redacción original en la Cámara Baja, toda esta trama hubiese sido imposible sin el acompañamiento de algunos gobernadores que necesitan ampliar sus cajas provinciales con la coparticipación del impuesto.
Ante esta nueva realidad y aún pendiente la reglamentación de la norma por parte del ejecutivo un sector del movimiento obrero empezó una ofensiva la semana pasada contra la restitución del gravamen que, dicho sea de paso, en un contexto de caída brutal del consumo tiene a agudizar la recesión imperante. Desde la Mesa Sindical El Salario no es Ganancia, compuesta por 65 sindicatos, plantearon en una conferencia de prensa que la restitución del impuesto a las ganancias es inconstitucional porque viola el artículo 81 de la Carta Magna que versa que ningún proyecto de ley desechado totalmente por una de la Cámaras (como ocurrió en el Senado) podrá volver a ser tratado en las sesiones del mismo año. Ante esa violación presentarán un amparo en la justicia sin renunciar a la lucha en los lugares de trabajo y prometen paritarias difíciles para recuperar el salario perdido por la restitución del impuesto.
Por otro lado, Pablo Moyano, uno de los triunviros de la conducción de la CGT en una conferencia de prensa realizada en la sede de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte, anunció una masiva movilización a tribunales para fines de julio o principios de agosto para acompañar el reclamo que presentarán en la justicia. En tal sentido el líder camionero señalo: “Es un impuesto regresivo donde se pierde el 30 por ciento de los salarios. Fijate la contradicción, los gremios de transporte fuimos esenciales durante la pandemia y hoy nos vuelven a castigar sacándonos parte del salario.”